Como una muestra más del gobierno en la erradicación de la violencia en contra de las mujeres, catalogó la Seremi de la Mujer y la Equidad de Género, Andrea Méndez Valenzuela, la recién puesta en marcha de la Ley Karin, que comenzó a regir el pasado 01 de agosto y que en materia de género, sancionará diversos actos de violencia con enfoque de género.
«La ley Karin representa el compromiso del gobierno del presidente Boric Font de avanzar hacia un trabajo decente, con especial énfasis en problemáticas que impactan fundamentalmente a las mujeres, como el acoso sexual y laboral. Uno de los elementos centrales para nuestro ministerio es la exigencia de disponer de un protocolo preventivo, lo cual es esencial para instalar una cultura organizacional basada en el respeto”, indicó la Seremi de la Mujer y la Equidad de Género, Andrea Méndez Valenzuela.
De acuerdo con los últimos datos de la Dirección del Trabajo, entre 01 enero 2022 y 30 de abril 2024, se han recibido 4.645 denuncias por acoso laboral (3.804 denuncias hechas directamente por los trabajadores y de estos 67,8% son mujeres) y se han registrado 2.248 denuncias por temáticas relacionadas con acoso sexual, de las cuales 1.238 afectan directamente a personas trabajadoras, siendo mujeres el 93,1% de las víctimas.
Por su parte, el Seremi del Trabajo y Previsión Social, Rodrigo Díaz Cordaro indicó: Dentro de lo importante de esta Ley, modifica la definición de acoso laboral y incorpora el concepto de violencia en el trabajo, establece la obligatoriedad del protocolo de prevención y plazos concretos para la investigación de acoso laboral y además medidas de atención sicológica temprana, les da un rol a las mutualidades que por Ley lo deben cumplir. La violencia y el acoso pueden dañar, la salud, la dignidad y el bienestar de las personas en el trabajo, y en particularidad para las mujeres, dificulta el acceso al mercado del trabajo, que permanezcan en él y que progresen profesionalmente”, reafirmó.
En este contexto, en materia de género, la Ley además de incluir el acoso laboral, sexual (que afecta a su mayoría a las mujeres), es una invitación a los empleadores a tomar medidas de protección, investigar y proteger a los empleados y empleadas ante represalias, ampliando el rango de denuncia, incorporando a la dirección del trabajo y los tribunales laborales.-
En el caso particular del caso de acoso sexual, estará prohibido el envío de mensajes o imágenes sexuadas explicitas, ofrecer recompensas a cambio de favores sexuales o amenazas, manifestar presiones de carácter sexual, y cualquier otro requerimiento de carácter sexual no consentido por la persona que los recibe.
Por su parte, la Seremi destacó los dichos de la Ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Antonia Orellana, quien se refirió hace algunos dias, a esos otros espacios de violencia poco reconocidos, como lugares públicos, enfocados principalmente al rubro de los servicios, donde en ocasiones, la violencia viene por parte de un cliente (tercero). Así también, el espacio digital, donde también ocurre violencia y también afecta en su mayoría a la mujeres, y que antiguamente no era reconocida como tal en los tribunales, pero que hoy es posible incorporarla en sumarios e investigaciones, y finalmente; los espacios que van fuera de contexto laboral, y donde igualmente se ejercen las jerarquías, sin duda importantes avances que incorpora esta Ley que da termino a a prácticas antisindicales.
Cabe destacar, que como una manera de sencibilizar y difundir la importancia de la prevención e impulsar los denominados protocolocos que deberán incorporarse en empresas e instituciones, el gobierno ha desplegado un proceso formativo a nivel nacional enfocado a empleadores cumplan cada estipulación de dichos protocolos.
Finalmente, cabe destacar que la Ley Karin, nace en memoria de Karin Salgado, funcionaria pública y técnica en enfermería quien, tras sufrir un prolongado proceso de acoso laboral, decidió quitarse la vida ya que no pudo acceder a un canal de denuncia, protección y apoyo psicológico adecuado, lo que se espera sea parte del pasado.