Un órgano de 50 personas elegidas por la ciudadanía trabajará sobre la base de un anteproyecto propuesto por expertos designados por el Congreso.
Tras duras semanas de negociaciones, las fuerzas políticas con representación parlamentaria lograron llegar a un acuerdo que de inicio a un proceso de redacción de una propuesta constitucional.
Tuvieron que pasar 99 días desde que la propuesta de carta magna redactada por la Convención Constitucional fue rechaza, para que los distintos sectores encontraran un consenso que de comienzo a un nuevo proceso.
Las principales trabas en las negociaciones fueron el número de convencionales y rol de los expertos, ya que desde la oposición proponían un órgano compuesto por personas electas y otras designadas por el Congreso, lo que era rechazado por las fuerzas de gobierno.
Además, se comenzó con una propuesta de 155 convencionales, al igual que en la instancia anterior y la composición de la Cámara de Diputadas y Diputados, lo que finalmente quedó en 50, pero todos electos por la ciudadanía.
Otro de los consensos alcanzados es que exista un anteproyecto elaborado por un grupo de 24 expertos, donde cada cámara del Congreso Nacional elegirá 12, los que además realizaran el trabajo de armonización del articulado aprobado.
Con esto, el órgano redactor será 100% electo, como buscaba el oficialismo, y los expertos tendrán un rol patagónico con la escritura del anteproyecto, como quería la oposición.