BancoEstado interpuso una querella y ahora es el Ministerio Público quien deberá identificar a los posibles imputados por esta estafa que le ha causado a la entidad financiera pérdidas cercanas a los $60 millones.
Una millonaria afectación a sucursales de CajaVecina llevada a cabo por una red de estafadores se reveló recientemente.
¿Qué pasó?
De acuerdo con un reportaje de Radio Biobío, BancoEstado llevó a cabo una investigación interna a inicios de este año tras una serie de denuncias de operadores, principalmente dueños y dueñas de negocios de barrio.
Dicha investigación dejó al descubierto una estafa que le ha causado al banco pérdidas cercanas a los $60 millones. Por esta razón, decidieron interponer una querella y ahora es el Ministerio Público quien deberá identificar a los posibles imputados.
El objetivo de los estafadores era “reventar” el cupo de la sucursal (el negocio), esto tras memorizar la clave de acceso del operador y robar el dispositivo. La investigación interna reveló que esta fórmula fue usada en las más de 370 denuncias presentadas solo durante este año.
Detalles del método
Las cámaras de seguridad de los negocios fue clave para desentrañar el método usado: el delincuente ingresaba al negocio pidiendo hacer un depósito y cuando el operador de la CajaVecina digitaba su PIN secreto en el aparato, este la observaba y memorizaba.
La segunda parte consistía en que, con el PIN ya memorizado, el ladrón sustraía la máquina aprovechando un descuido del dependiente y luego comenzaba a depositar dinero hasta reventar el cupo de la sucursal. En ocasiones se dejaba una máquina de reemplazo para que el operador no se diera cuenta del hurto inmediatamente y tener así más tiempo a su favor.
En la querella ingresada ante el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, la institución financiera aseguró tener en su poder el listado completo de RUT de las cuentas en las que se depositaba el dinero una vez que eran robados los dispositivos, afirmando que dicha información estará disponible para el Ministerio Público cuando la pidan.
Por Daniela Pérez
Fuente: cnnchile.com