El Juzgado de Garantía de Arica declaró admisible la querella presentada por el instituto. El 30 de mayo, una jueza resolverá la competencia de los tribunales civiles en este polémico caso.
Este miércoles, el Juzgado de Garantía de Arica declaró admisible la querella del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) por tratos crueles a conscriptos de la Brigada Motorizaza N°24 Huamachuco en la comuna de Putre.
El recurso judicial fue presentado por el delito de “apremios ilegítimos”, que se encuentra en el Código Penal. “Se trata de un delito ajeno y que no afecta fines o bienes jurídicos estrictamente militares”, detallan desde el instituto.
La acción fue acogida a trámite y la jueza Paulina Zúñiga programó para el próximo jueves 30 de mayo una audiencia para resolver la competencia de los tribunales civiles en este caso que ha remecido al Ejército.
La querella fue presentada contra quienes resulten responsables “de los tratos crueles de los que fue víctima el grupo de conscriptos” durante la instrucción. “Fue en este contexto que falleció Franco Vargas y varios otros tuvieron que internarse”, complementan.
Detalles del caso
En el recurso se detalla que el 21 de abril pasado, el grupo de 250 jóvenes de la Brigada Huamachuco inició una instrucción en el sector Pacollo, en la comuna de Putre. De este total, 45 recibieron “agresiones por parte de los superiores a su cargo“.
Estas 45 personas “fueron sometidas a golpes de pies y puños por parte de sus superiores a cargo, en cualquier contexto y momento: mientras se desarrollaba la instrucción, cuando dormían, comían o durante las caminatas (…), las que podían ser nocturnas con temperaturas bajo cero, sin la ropa adecuada o en el día sin la protección solar mínima”.
También se menciona que a los soldados se les privaba de sueño durante varias noches, acción que en la jerga castrense es llamada comúnmente como la “imaginaria”, en que se les permitía dormir solamente una hora por noche.
El texto dice que el maltrato incluía exposición a fecas de ratones en espacios de preparación y consumo de alimentos. “Los obligaban a comer con las manos de una misma bandeja grupal y a utilizar letrinas grupales sin acceso a medidas higiénicas de aseo personal”, añade.
“Todas estas situaciones tuvieron lugar a 4 mil 600 metros sobre el nivel del mal, a -15 grados durante la noche y con índices de radiación solar extremadamente altos durante el día”, agrega la querella.
Finalmente, desde el INDH acusan que todas estas situaciones “ocurrieron dentro de un
contexto de maltrato verbal permanente, con frases homofóbicas o de connotación sexual. Al ir por atención médica recibían
trato despectivo y les decían todo tipo de frases aun después del fallecimiento de Franco Vargas, situación que algunos de ellos presenciaron directamente”.
Fuente: cnnchile.com