Una nueva etapa en su vida, en una casa moderna, segura y confortable, empezó hace algunos días la esforzada vecina de Puerto Aysén, Sonia Raín Alvarez, quien recibió de manos de la Seremi de Vivienda, Paulina Ruz, las esperadas llaves de su casa propia, un sueño que en el transcurso de siete meses se hizo felizmente realidad.
Fue en agosto del año pasado cuando la Seremi Paulina Ruz supo de su caso y se dirigió hasta la dirección de la adulta mayor, que había perdido su casa en un incendio en el año 2003, comprobando las pésimas condiciones en que estaba viviendo, ocupando un inmueble en gran parte inhabitable, situación que ameritaba una solución definitiva en el menor tiempo posible.
Fue así como la autoridad sectorial hizo las gestiones y consiguió un subsidio en la modalidad de Asignación Directa, donde por tratarse de casos muy especiales se exime del proceso de postulación, para que la Señora Sonia pudiera así acceder a la construcción de una nueva vivienda, en el mismo lugar en que estaba su antigua casa, al final del pasaje Palena, en la Población Pedro Aguirre Cerda.
Para facilitar aún más el proceso, desde el Ministerio de Vivienda se entregó a la adulta mayor un subsidio de arriendo, el cual sirvió como apoyo para hacer más confortable el periodo de espera, mientras se construía su vivienda definitiva.
Así pasaron los meses, hasta que en los últimos días llegó la entrega de llaves, emotivo momento que fue destacado por la Seremi de Vivienda Paulina Ruz, quien se mostró muy feliz de ver que el Gobierno sigua llegando con soluciones concretas a las familias que más lo necesitan. “Es un final feliz, a la Señora Sonia la conocimos en agosto del año pasado. Ella tenía grandes problemas con su vivienda, la vine a visitar un día sábado, donde pudimos apreciar una realidad bastante fuerte, ya que tenía problemas con los cables, se llovía, había peligro en el segundo piso que ya estaba inhabilitado, estaba pasando frío, pasaba el aire. Entonces nos comprometimos a ayudarla y hoy está el resultado. Le entregamos su casa totalmente nueva, con revestimiento, con termopanel, acondicionada para que ella pueda tener una buena calidad de vida. Este es un nuevo comienzo y también atesoramos esa sensación de que con los recursos del Estado realmente estamos mejorando la vida de muchas vecinas y vecinos”, manifestó.
Sin duda la más feliz era la Señora Sonia Raín, quien con emocionadas palabras recordó las condiciones en que estuvo por varios años y el gran cambio que significa tener una casa nueva para vivir con sus hijos y con uno de sus hermanos. “Estoy muy contenta porque la Seremi me ayudó mucho. Como ella me vino a ver y la casa estaba muy mala entonces ella dijo que me iba a ayudar para que saliera pronto una solución, para que tenga mi casita y pueda postular a los subsidios de arriendo. Yo le dije que ojalá porque estaba sufriendo mucho, de repente había tremendos vientos al punto que nos daba miedo que la casa se pudiera caer. Felicito también a los maestros, a todos los que se preocuparon por mí para que me hicieran mi casa pronto, antes de este invierno”, afirmó.
De igual forma la Señora Sonia agradeció el apoyo recibido y la oportunidad de tener una casa como la que siempre soñó. “Quiero agradecer a la Seremi porque ella apuró mucho las cosas y ya estoy aquí recibiendo las llaves de mi casa y darle las gracias a Dios por todo. Esta casa es muy preciosa, muy abrigada, no como la otra que no tenía nada, que entraba el frío por todos lados, estaba toda caída porque cuando hubo un temblor grande se fueron todos los palos para abajo, así que la casa estaba afirmada en la tierra, o más bien la estaba sosteniendo el baño. Entonces ese era el miedo que tenía, cuando había viento que se caiga la casa y yo me quede abajo y por eso ahora estoy tan emocionada”, aseguró.
Tras hacer un recorrido por el inmueble, que cuenta con aislación térmica de primer nivel, además de piso flotante en las piezas y cerámicas en cocina y baño, la Señora Sonia se comprometió a cuidar su nuevo hogar, para lo cual esperaba trasladar su cocina y su cama esa misma tarde, para empezar desde ya a disfrutar la nueva vida que se merece y que soñaba por tantos años.