Una gigantesca convocatoria se observó en la capital Buenos Aires, tras el llamado a huelga general de los grandes sindicatos y diferentes organizaciones sociales. Rechazan la llamada Ley Omnibús.
Las tres grandes centrales sindicales y organizaciones sociales convocaron a un paro nacional este 24 de enero. Las calles de diferentes ciudades de Argentina se vieron llenas de personas que salieron a manifestarse en contra del proyecto político del ultraderechista Javier Milei. En la capital Buenos Aires se vieron imágenes que recuerdan la convocatoria de la selección trasandina tras ganar la última Copa del Mundo. Las agrupaciones llamaron a rechazar el proyecto llamado Ley Omnibús que busca desmantelar al Estado.
Los carteles en medio de la manifestación acusan a Milei de defender “a la casta” y de promover la pobreza con los ajustes. Uno de los lemas más repetidos en las calles argentinas es “la patria no se vende”, en alusión a los intentos del gobernante de vender importantes activos estatales y permitir el ingreso indiscriminado de capitales extranjeros, los que podrán incluso comprar sin límites porciones del territorio. Las centrales sindicales se convocaron frente al congreso para exigir el bloque de la llamada Ley Omnibús.
Las encuestas muestran que a un mes de la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada perdió buena parte de su apoyo popular y que su plan es rechazado por la mayoría de la población. El gobierno del ultraderechista avanza en el congreso con una suerte de reforma constitucional que modifica una serie de leyes. Uno de los puntos más polémicos es que le atribuye al presidente facultades legislativas y nuevas disposiciones de rango constitucional. Los expertos de diferentes sectores políticos critican y rechazan la iniciativa.
Ningún diputado se puede hacer el distraído de lo que estamos discutiendo”
— Héctor Daert de la central sindical CGT de Argentins
La convocatoria estuvo frente a un enrome despliegue de fuerzas se seguridad por orden del gobierno, buscando evitar que no se produjeran cortes en las rutas. Los efectivos pueden realizar controles en los servicios de transporte e incluso revisar los buses que llegaban a la capital. Tiempo Argentino detalla que el dirigente de la central CGT, Héctor Daert, llamó a que el gobierno de la ultraderecha “no criminalicen la protesta porque les va a costar en todo el mundo. Nada se construye con palos”.
El propio Daert advirtió a los legisladores argentinos que “ningún diputado se puede hacer el distraído de lo que estamos discutiendo”. El dirigente sindical agregó que “venimos a decirle a los diputados y senadores que en sus manos está la posibilidad de poner en caja de nuevo la democracia”. En las horas previas el gobierno logró que un partido de la oposición le diera los votos para llevar la llamada Ley Omnibús a una votación en la sala del congreso, donde no cuenta aún con los apoyos para que sea aprobada.
Por Claudio Silva
Fuente: adnradio.cl