Como parte de una estrategia integral para abordar los desafíos de seguridad pública el Presidente de la República anunció este jueves 6 de abril un “plan de reforzamiento de la seguridad de las policías” y el “plan calles sin violencia”.
El plan de reforzamiento de la seguridad busca proteger a los funcionarios policiales que participan en operativos y entregarles más y mejores herramientas para enfrentar la delincuencia y el crimen organizado. Con ese objetivo el Gobierno ha destinado un fondo extraordinario de 1.500 millones de dólares para la compra de nuevo equipamiento, la actualización de armamento y el mejoramiento de los protocolos operativos. Además, se enviará al parlamento la legislación que permita definir por ley la obligatoriedad de cámaras por parte de policías.
Plan de intervención “Calles sin violencia” El plan se desarrollará en 30 comunas del país que concentran un tercio de la población nacional y cerca del 50% de los delitos más violentos.
El piloto comenzará en la comuna de Santiago durante el mes de abril y en el resto de las comunas comenzará en mayo.
La intervención considera estrategias específicas para cada territorio de acuerdo con sus características e implica el trabajo conjunto entre Carabineros, PDI, Fiscalía, instituciones fiscalizadoras, municipalidades y otros órganos de gobierno, y además define una línea de base comuna por comuna y una evaluación mensual de resultados y avances.
La intervención se diseñó sobre la base de los factores que están presentes en los territorios donde existe mayor ocurrencia de delitos violentos entre ellos destaca la presencia de pandillas, crimen organizado y tráficos de drogas. Impunidad penal (delitos graves donde no se han encontrado los responsables o están fugados), el tráfico y presencia de armas, y el deterioro barrial y consumo de alcohol y drogas en la vía pública.
El plan considera cuatro áreas:
a) Persecución penal
– Focalización de la persecución penal priorizada para esclarecer los homicidios y delitos asociados.
– Focos investigativos especialmente donde hay tráfico de armas.
– Refuerzo del trabajo coordinado que realizamos con Fiscalía y PDI.
– Apoyo de información y fiscalizadores SII/Aduanas.
– Capacitación a la Fiscalía y policías en investigación de delitos de alta complejidad (homicidios con imputado desconocido, CO).
b) Reforzamiento de actividad policial:
– Focalización intensiva en la fiscalización de armas en sectores a intervenir
– Aumento de patrullajes, operativos masivos y puntos de control: controles de identidad, búsqueda de armas irregulares, empadronamiento y fiscalización de asuntos migratorios, órdenes de detención pendientes, prófugos.
– Dotación adicional en Carabineros para estas tareas.
– Programa especial de refuerzo de los equipamientos de protección.
c) Fiscalización de infracciones e incivilidades
– Fiscalización municipal de comercios regulares e irregulares; locales de venta de alcohol; fiscalización de salud (cocinerías), de Aduanas y SII (contrabando); fiscalización de inmuebles ocupados de manera abusiva e ilegal.
d) Intervención comunitaria y recuperación de espacios públicos
– Llevar el Estado donde ha estado ausente.
– Servicios sociales y trámites públicos (Fosis, Registro Civil, Senadis, Senama, Sence, Sercotec).
– Recuperación de espacios públicos: inversiones de mejoramiento Subdere, MINVU, Serviu, Municipios, entre otros.
– Inversiones relativas a prevención del delito: cámara de seguridad, luminarias, etc.